Hay muchos tipos de familias, chiquitas, grandes, con un solo papá, con cinco abuelitos y hay otras como la mía, en la que algunos vivimos con un océano de por medio, pero cuando uno quiere, usando la imaginación se pueden construir puentes de 10.000 km que alegran al corazón ¿no les parece?
viernes, 3 de julio de 2009
Que se preparen las vaquitas
y vayan encendiendo el fuego, que los dientes van queriendo asomar y ya saben que soy de buen comer!
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